Setas de ostra rosadas cultivadas en una unidad de 'mini granja'. Fotografía: Hannah Shufro

Además de lucir bonita, el inventor Smallhold afirma que es mucho más sostenible que la agricultura tradicional

Los comensales en el Bunker, un restaurante vietnamita en Brooklyn, pueden no darse cuenta de que las setas en su bánh mì se cultivaron en una "mini granja" con aspecto de nave espacial, de color azul, debajo de sus asientos. Pero es solo uno de un número creciente de granjas de hongos enchufables que se multiplican en la ciudad de Nueva York.

Smallhold, la compañía que creó la idea, crece alrededor de 100 libras de varios tipos de hongos a la semana, y luego los distribuye en tres cuartas partes de las mini "granjas" de clima controlado que se realizan por la ciudad. Los hongos terminan de crecer dentro de las unidades automatizadas, mientras que un técnico remoto ajusta la humedad, el flujo de aire y la temperatura, ofreciendo a los chefs en el lugar, lotes frescos y de reposición automática de un alimento que tiene una vida útil corta.

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Fuente: The Guardian - Laura Pitcher